A estas alturas del nuevo milenio, donde la presencia de lo digital cobra una insospechada vida con Internet, es especialmente anacrónico visitar un museo con la esperanza de encontrar los originales.
Los museos son esos espacios artísticos que formulan, con su presencia en el siglo XXI, la hegemonía cultural por excelencia de un territorio. La pregunta que me hago es ¿son necesarios estos espacios cuando el arte se ve/mira/observa más que nunca desde un óptica digital? Mi respuesta es afirmativa.La importancia que adquiere la próxima exposición de Edward Hopper (EE.UU., 1882-1967) en el Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid, es vital para acercarnos a un mundo que solo se puede comprender desde la proximidad del visionado de sus obras en directo.
Del 12 de junio al 16 de septiembre de 2012, son las fechas elegidas para visitar una retrospectiva única en el mundo y contemplar las inquietantes y tristes atmósferas artísticas de Hopper.
Texto: Ángel Román
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"Espacio dedicado a la cultura visual contemporánea, la creatividad digital y motor de ideas para creadores en la era tecnológica".
Ángel Román es productor cultural y consultor empresarial para proyectos tecnológicos. Especialista en nuevos medios y sociólogo de la moda. Ha publicado varios libros sobre ensayos de cine, arte y marketing digital. También es formador en social media y un apasionado de los nuevos modelos de negocio digitales.
Además está interesado en añadir valor a lo intangible en los productos y servicios de las Industrias Creativas y Culturales.
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